La reforma del gobierno de Francia sobrevive a las dos mociones de censura este lunes en la cámara baja del Parlamento luego que el presidente Emmanuel Macron buscó la semana pasada elevar la edad de jubilación de 62 a 64 años sin la aprobación de los legisladores.
La moción, defendida por el centrista Charles de Courson, ha obtenido 278 votos de los 287 que necesitaba para hacer caer el Ejecutivo de Élisabeth Borne y la reforma de las pensiones impulsada por el presidente, Emmanuel Macron.
La segunda moción de censura, presentada por el partido ultraderechista Agrupación Nacional (RN), que solo obtuvo 94 votos. Otros partidos de la oposición dijeron que no votarían a favor.
Ante negativas de las dos mociones de censura se considera aprobada la reforma de pensiones, pero su entrada en vigor deberá esperar hasta resolver los recursos ante el Consejo Constitucional anunciados por varios grupos de oposición.
Los principales sindicatos franceses han anunciado una novena jornada nacional de huelgas y protestas para el jueves. "Nos reuniremos de nuevo el jueves", ha anunciado Helene Mayans, del sindicato de izquierda CGT, en una manifestación en el centro de París.