En una reciente intervención, el presidente Andrés Manuel López Obrador lanzó severas críticas hacia algunos ministros del poder judicial, acusándolos de actuar en beneficio de las élites económicas del país. Según el mandatario, estos funcionarios facilitan amparos que permiten a grandes empresas evadir el pago de impuestos, lo que representa una significativa pérdida para las arcas públicas.
Durante su discurso, López Obrador mencionó que, con algunas excepciones honorables, varios ministros se han comportado históricamente como "empleados de los potentados". Detalló un caso particular en el que un ministro, cuyo nombre no fue revelado, habría permitido que una empresa específica evitara pagar impuestos durante casi diez meses, lo cual habría costado al Estado cerca de 24 mil millones de pesos.
"Están acostumbrados a ser empleados de los potentados (...) con honrosas excepciones, por qué hay ministros que hacen la excepción de la regla, expresó López Obrador. Agregó frustrado: Si no lo denunciamos aquí no resuelven, haciendo hincapié en la necesidad de una mayor transparencia y acción judicial efectiva ante estos abusos.
El presidente expresó su esperanza de que los tribunales del país tomen cartas en el asunto y procedan a analizar y resolver estos expedientes de manera justa y eficaz. Esta declaración forma parte de la continuada campaña de López Obrador contra la corrupción y la evasión fiscal, pilares centrales de su administración.