Ante el preocupante clima de violencia que rodea a las elecciones, el gobierno ha anunciado que el Ejército y la Guardia Nacional se encargarán de proteger a los candidatos que enfrenten riesgos para su integridad. Esta medida, que establece tres niveles de riesgo, busca salvaguardar la seguridad de los contendientes en un proceso electoral marcado por la tensión y la amenaza constante.
Sin embargo, la oposición ha expresado su escepticismo respecto a la eficacia de este esquema de protección, considerándolo insuficiente para garantizar la seguridad de los candidatos. Por su parte, el partido oficial, Morena, ha instado a no politizar el tema y a colaborar en la implementación de medidas efectivas para proteger a todos los participantes en el proceso electoral.
Mientras tanto, el Instituto Nacional Electoral (INE) ha llamado a los partidos políticos a no permitir la entrada de dinero de origen dudoso o ilícito desde el inicio de la contienda electoral. Esta advertencia resalta la importancia de mantener la transparencia y la legalidad en el financiamiento de las campañas políticas, con el objetivo de preservar la integridad del proceso electoral y fortalecer la confianza ciudadana en las instituciones democráticas.