La tragedia de Liam Payne, exintegrante de One Direction, ha conmocionado al mundo. Nuevas imágenes de cámaras de seguridad y datos de la investigación ofrecen un vistazo escalofriante a los últimos momentos del cantante, antes de su muerte el pasado 16 de octubre en el hotel CasaSur de Buenos Aires. La polémica gira en torno a las circunstancias de su fallecimiento, las responsabilidades involucradas y las decisiones tomadas en las horas críticas.
La imagen que sacudió al mundo: Liam Payne llevado a rastras
Una imagen de seguridad del lobby del hotel CasaSur fue difundida recientemente por portales como TMZ y el New York Post. En ella, se ve a Liam Payne siendo llevado a rastras por personal del hotel, ocho minutos antes de caer desde el balcón de su habitación en el tercer piso. Según el expediente liderado por el fiscal Andrés Madrea, la puerta de su habitación estaba abierta, lo que desmiente teorías iniciales de que había sido encerrado.
Los empleados del hotel declararon que llevaron a Payne a rastras por segunda vez ese día debido a su estado, presuntamente causado por una mezcla de alcohol, cocaína y sertralina. Una vez dentro de la habitación, lo dejaron solo, mientras oían cómo rompía objetos.
¿Por qué una habitación con balcón?
Una de las preguntas más inquietantes del caso es por qué se permitió que Liam Payne, en evidente estado de vulnerabilidad, permaneciera en una habitación con balcón. Según el expediente, un empleado del front desk llamó al 911 poco después, advirtiendo:
"Necesitamos que nos envíen a alguien urgente... está en una habitación que tiene balcón y, bueno, estamos con temor de que haga algo que le ponga en riesgo su vida."
Esta decisión podría llevar a que los empleados del hotel enfrenten cargos, dependiendo de los análisis de la computadora del front desk y los teléfonos del personal.
El rol de Rogelio Nores: el principal imputado
Rogelio Roger Nores, empresario y presunto manager de facto de Payne durante su estadía en Buenos Aires, es el principal acusado en el caso. La fiscalía lo señala por abandono de persona seguido de muerte y por facilitar el acceso a estupefacientes.
Nores habría abandonado el hotel apenas 50 minutos antes de que Payne fuese llevado a rastras a su habitación. Además, el empresario habría proporcionado dinero para que el cantante adquiriera cocaína en Palermo, según el expediente.
El impacto de la sertralina: un cóctel mortal
El análisis toxicológico reveló que Liam Payne tenía sertralina, un antidepresivo, en su sistema, mezclado con alcohol y drogas recreativas. Su psiquiatra en Estados Unidos había advertido que esta combinación podía ser letal, provocando alucinaciones e incluso ideaciones suicidas.
Tanto el padre de Liam como la psiquiatra proporcionaron pruebas clave al fiscal Madrea. Estas evidencias, sumadas al contenido del teléfono del cantante, fortalecen la acusación contra Nores, quien podría enfrentar hasta 15 años de prisión.
¿Podrían surgir más acusados?
La investigación continúa, con la fiscalía analizando más de 800 horas de grabaciones de cámaras de seguridad y dispositivos electrónicos. Aunque Nores es el principal imputado, no se descarta que otros empleados del hotel o proveedores de drogas puedan enfrentar cargos adicionales.